martes, 26 de julio de 2011

Ranking- mejores películas/series de zombies


#1 The dawn of the dead- El amanecer de los muertos (2004)- Esta película es un remake de la de George A. Romero, no es que no opine que este afamado director es un buen pionero, pero como dicen por ahí el alumno supera al maestro y, realmente esta es la mejor de todas las películas de zombies que he visto en mi vida (no es porque sea una de las más conocidas, pero me encantan las películas super realistas, así que veánla cuando puedan)

#2 The Walking Dead (2010)- en verdad me emocioné demasiado cuando un amigo me avisó que iban a estrenar por primera vez una serie del genero más amado para mí (el zombie), en verdad muy recomendable, muy bien producida, una trama genial (aunque muy parecido en el comienzo a la película 28 días después mejor con mejor resolución por lo mismo que es más reciente), muy cómoda y está en youtube traducida al español, también pueden verla en megavideo pero saben que esa página es bien triste y estafadora.

#3 Dead seat- Una muy muy muy buena serie brítanica de zombies, con alta dosis de suspenso, buena trama (sobre todo original). Lleva a la pantalla chica al reality conocido mundialmente: "gran hermano", desde la perspectiva de la invasión zombie, atrapa todo el morbo televisivo y realmente te engancha, recontra recomendable (también en youtube)

#4 Rec (1,2,3,4,5)- Siempre elogie a las películas españolas porque ciertamente me parecen estupendas, no escatiman nunca en la realización, tienen guiones estupendos, entre otras cosas. Una película de terror y del género zombie que la representa demasiado bien es Rec (uno y dos), se ha estrenado recientemente Rec genésis que es una precuela de la primera y segunda y está por estrenarse Rec apocalipsis.

Comedia (a decir verdad, las comedias de zombies no me causan mucha gracia pero estas fueron las únicas que me parecieron bien interesantes y divertidas)

#5 Bit me (2008)- Esta es una serie pequeña, solo tiene cinco capítulos de diez minutos cada uno, muy digerible y divertida (TOTALMENTE), a la vez macabra, tiene una serie de sentimientos encontrados. Relata la historia de tres chicos que juegan al xbox 360 a asesinar zombies, son los chicos más adictos que pueden existir. Estos nerds fracasados no tomarán en cuenta que podía realmente haber un apocalipsis zombie y, ¿estarán preparados para ello?, eso deben de verlo (me gusta dejar todo con el suspenso), 100 por ciento recomendable.

#6 Zombieland- Bueno es obvio que medio mundo ah visto esta película, a decir verdad yo no lo la había visto hasta el año pasado porque nunca me había interesado mucho la comida zombie pero esta es divertida, ingeniosa, da un poco de miedo por ratos, veánla (si no la han visto ya)

Volviendo a la realidad de zombies que ENSERIO dan miedo... (no recomiendo soy leyenda de mi amado Will Smith porque a pesar de ser un peliculón, no siento que sea un película de zombies en todas sus letras, en realidad los seres que se muestran son realmente vampiros (eso era lo que se pretendía explicar en la versión original), o son vampiros o son unos entes extraños, pero zombies "zombies" no son)

#7 La noche de los muertos vivientes- (1990) (remake de la de 1968) No se si a ustedes, pero a mi me encanta esta película del gran George, es recontra vieja, tiene las clásicas escenas de "la chica indefensa corriendo por el campo y que luego se cae", de lo más tonto, pero tiene un no se qué que me llama realmente la atención, los muertos caminan super lento pero aún así las personas son atacadas, se encierran en la clásica casa "convenientemente" situada en el cementerio y los muertos se levantan de sus tumbas como antiguamente se ponía en las películas. Si les gusta el cine antiguo (me maté buscando este película en polvos azules HORRAS), les va a gustar esta, aunque el final es muy grotesco y nada alentador, sin embargo, a mi punto de vista es bien #winner.

(Esta es la primera parte luego vendrán las otras)

lunes, 21 de febrero de 2011

Miraflores (Lima) - Luis Carrillo (Días Dos y Tres)

Los días siguientes pasaron muy rápido. Desde el incidente en la Vía Expresa, las noticias solo pasaban alertas sobre este extraño virus. "Virus del Apocalipsis" le llamaron algunos periódicos, sensacionalistas como siempre. Al día siguiente de escuchar las noticias, volvimos a la universidad, yo curiosos de saber si alguno de nuestros amigos sabían algo, y ella medio asustada. Llegamos y vimos mucha menos gente de la habitual, considerando el pequeño espacio de nuestra universidad, estaba casi vacía. Encontramos a algunos de nuestros amigos, y nos pusimos a conversar en la cafetería sobre todo lo que había pasado hace unos días. Nos enteramos que algunos amigos estaban en casa, sus padres no los iban a dejar salir hasta que pasara todo esto. Todos creíamos que era algo temporal y que los veríamos pronto de nuevo, haciendo algunas bromas sobre alguno de ellos. Luego nos pusimos serios, y vi por primera vez que, aunque yo no estaba demasiado preocupado, todos si lo estaban. En las noticias lo habían clasificado primero como una mutación de la rabia que afectaba humanos y los volvía agresivos. Uno de nuestras amigas, fanática de los zombies, comentó que sería increíble que hubiera sido un virus zombie, y todos nos reímos. Luego de un rato, nos dijeron que tenían que ir a clase y nosotros, como toda la semana, decidimos faltar. Yo estaba cansado, quería volver a mi casa o salir por ahí con mi enamorada, pero ella decidió pasar por su casa, a dos cuadras de la universidad, para recoger unas cosas. Llegamos y no estaba su compañera de casa, así que pensamos que estaba en clase. Recogimos varias cosas y cuando estábamos a punto de salir, sonó el teléfono. Mi enamorada contestó y lo puso en altavoz. Eran sus padres. Habían escuchado de lo que estaba pasando en Lima, y querían saber si estaba bien. Habían estado llamando desde ayer, y nadie contestaba. Eso nos dejo preocupados, pues aunque sabíamos que su compañera de casa era fiestera y salia mucho, también sabíamos que siempre regresaba y que no haya estado desde el día anterior era raro. Mi enamorada mintió diciendo que las dos se habían quedado hasta tarde en la universidad para terminar algunos trabajos, y regresaban relativamente tarde, y que por eso no habían contestado las llamadas. Les dijo que en adelante trataran de llamarla al celular, que los quería, y que no se preocuparan. Colgó en inmediatamente tratamos de llamar a su amiga. Nada. Nos preocupamos, le dejamos una nota y nos fuimos. Cuando llegamos a mi casa, la gente estaba muy nerviosa.Mucha gente se reunía en la la gran iglesia que había cerca, otros conversaban en las calles preocupados, algunos negocios cerraron muy temprano, y habían mas policías de lo normal. Decidimos quedarnos en casa hasta el día siguiente. Esa noche vimos en el noticiero que lo que pasaba aquí, estaba pasando en otros lugares. Pasaron imágenes varias ciudades y las cosas parecían estar peor que acá. Me llamó la atención que para ser gente rabiosa y agresiva, se movieran bastante lento. Apague la tele y dormimos, tratando de no pensar en eso.

Al día siguiente, todo seguía mas o menos igual según veíamos desde la ventana de mi apartamento.Gente preocupada, rezando, policías, pero también algunos alarmistas que asustaban a la gente con sus predicciones sin sentido. Prendimos la tele y lo que vimos me hizo sentir miedo, miedo real, que no sentía hace mucho: Las personas agresivas no tenían rabia, es más, no estaban vivos, eran muertos que habían despertado y estaban atacando a todos. "No, no es una broma", repetía el presentador, un señor con bigote, "es un raro virus, por favor no pierdan la calma y permanezcan en casa, estamos a la expectativa de las declaraciones que puedan suceder en las siguientes horas". Mi enamorada estaba en shock, esto no podía pasar, pero estaba pasando. Y entonces escuchamos el ruido de un choque en la calle y varios gritos. Nos asomamos y vimos un choque horrible, una camioneta contra un taxi, y de la camioneta salio esta figura tambaleándose. Tenía el brazo atrapado, pero cuando vio a la gente acercarse, se retorció tratando de alcanzarlos con la otra mano, y saliendo del carro perdió su otro brazo. Todos retrocedieron horrorizados, no trato de ayudarlo a salir pero fue mordido. Se acercaron rápidamente los policías, y desde ahí todo fue caos. Retiraron a todos, le dispararon al hombre del carro y al infectado, generando rechazo en los que estaba presentes y mientras gritaban y peleaban, salio una niña de la parte trasera del carro, que no estaba tan dañada. Se acercaba lentamente a la gente y emitía un sonido extraño, una especie de gemido. Los policías trataron que nadie se acerque, pero la gente no hizo caso y al acercarse fueron mordidos. No pudimos ver más. Cerramos las cortinas, y le dije que no saldríamos de ahí para nada. Estuvimos un rato encerrados, sin saber que hacer, cuando me llego un mensaje. Era de mi amiga fanática de zombies. Decía: "Vi las noticias, no se queden en tu casa, bajen al primer piso, es peligroso estar arriba, vengan a mi casa". Por un momento no supimos que hacer, si bajar y enfrentarnos a lo que hubiera allá abajo dejando la seguridad de nuestra casa o quedarnos ahí, relativamente seguros. Decidimos hacerle caso, si alguien sabía que hacer en caso de zombies, era ella. Bajamos lo mas rápido que pudimos, salimos, y nada pudo prepararnos para lo que vimos afuera.


PD: Quiero disculparme por no escribir hace un tiempo, pero hubo un incidente en el lugar donde estaba, los zombies nos encontraron y tuvimos que huir, y recién es seguro escribir. Tratare de recuperar el tiempo perdido

martes, 14 de diciembre de 2010

San juan de miraflores (Lima)- Dania Gonzales (Día tres)

Siempre supe (por lo que veía en televisión) que los perros eran más sencibles a todos los desastres o cosas así. Giaco no fue la excepción ese día. Mi patio no era el patio más lindo del mundo, no era muy limpio. Nunca tuve la mejor casa del mundo, pero la quería porque era lo que mis padres pudieron pagar. Lamentablemente, el saber que la construcción no estaba preparada para lo que se venía no me puso muy contenta. Mi perro era recontra inteligente, una vez en la madrugada nos había avisado cuando unos ladrones merodeaban la recta, era vivo y siempre estaba atento a cualquier situación. El caos rondó lima esos dos días, nadie podía creer nada. Eramos yo, mi mamá y mi perro y mis dos hermanas, metidas en nuestra casa de dos pisos, con la puerta de fierro cerrada con seguro y el miedo, la incredulidad en nuestro cerebros. Mi perro ya nos había avisado dos días antes. Todo comenzó la mañana del lunes, yo tenía que ir al colegio y mis hermanas también. Nos levantamos como una mañana cualquiera, preparé el desayuno y me cambié el uniforme. Giaco ladró como nunca y yo salí al patio (en el patio que estaba empinado se podía ver todo lo que pasaba abajo), un señor con saco se arrastraba en el suelo a unos pocos metros abajo de mi casa, prácticamente a la esquina. Me dió pena verlo porque supuse que algo extraño había pasado, un atropello, un disparo talvez. Una vecina mía bajó a auxiliarlo (la recuerdo, era una señora muy colaboradora con todos, recontra servicial) y bueno lo que ví no me gustó para nada. El señor enternado la sujetó del cuello y la mordió como si fuera un animal violento. Ya no podía creer que eso estuviera pasando, quise golpearme o echarme agua en la cara pero sabía que no era sueño que yo estaba lo suficientemente despierta y que esto era una realidad. No quise salir de mi casa, pero mi mamá no logró creerme. Subí al micro con mis dos hermanas y con unos escalofríos incontrolabres. Al llegar al colegio me dí con la sorpresa de que habían cancelado las clases. La situación se ponía tensa con las horas. Nosé como pero logré llevar a mis hermanas a mi casa, a salvo, con mi mamá y la puerta cerrada. Ahora estamos ahí y el panorama (lo que llegué a ver por el patio no es nada agradable y me hace sentir en el fin del mundo). En las noticias salía el señor con el bigote (no recuerdo su nombre) creo que se apellida lucas, algo así. Todos los periodistas decían lo mismo, un poco creíble virus atacó al mundo, manténganse en sus casas. Si talvez Giaco no hubiera ladrado, no estaría aquí... no sé lo que pasará luego, si podremos sobrevivir a esto, pero por ahora pienso en que gracias a dios seguimos vivas.

Miraflores (Lima) - Luis Carrillo (Día Uno)

Antes que empezara estaba viviendo en Miraflores. Era en típico chico con plata. Estudiaba en una universidad prestigiosa, aunque eso si, bastante lejos, aunque esa semana había faltado a todas mis clases. Aprovechando que mi madre había viajado, me estaba quedando en su apartamento con mi enamorada toda esa semana. Ah, cierto, mis pares estaban divorciados. Cuando le dije a mi padre que me quería quedar en casa de mi madre, se opuso. Pero cuando le dije que me iba a quedar con mi enamorada en esa casa, aceptó gustoso. Incluso me dio dinero "extra". Ella vivía sola en un apartamento cerca a la universidad, sus padres, en provincia, así que no sospecharon que su hija se estaba quedando conmigo. La convivencia fue bastante mejor de lo esperado. Ella era hermosa. En verdad estaba enamorado de esta chica. Y todo entre los dos estaba perfecto. Esto era como una "última prueba", y la estábamos superando.

Aún recuerdo esa mañana. Me había despertado por el sonido del televisor. Ella estaba ahí, a mi costado, tapada hasta el pecho con unas sabanas de flores, y veía una noticia sobre un incendio o un accidente por la vía expresa. Me dijo que estaba asustada, que habían entrado unos bomberos y que no habían salido, y que hubo un asunto con una niña medio extraña. La bese, le dije que no se preocupara, que era un típico accidente y que no se preocupara. Luego de eso el día fue normal. Nos bañamos, cocinamos, salimos y volvimos a la casa a eso de las 10 de la noche. Cuando vives con alguien cerca a el centro cultural que era el parque Kennedy y sus alrededores, sueles demorarte mucho. Lamentablemente faltaban 3 días para que vuelva mi madre, así que teníamos que aprovechar los días que nos quedaban. Pero ni bien llegamos, prendió la televisión y, para mi sorpresa, aún continuaban con esta noticia Hablaban de que la policía había cerrado el lugar y había cercado el área. Ella se asusto, pero le dije que no se preocupara, que todo estaría bien, y apagué el televisor. La abracé, ya acostados, y me preguntó si la defendería si algo malo llegaba a pasar. Le dije, sin tomar la pregunta muy en serio, que no dejaría que nada le pase.

Hasta ahora no me perdono por no cumplir esa promesa.

sábado, 11 de diciembre de 2010

Instituto Cimas (Lima) -Diana Girón 10:30 am (Día uno)

Hasta antes de que todo comenzara yo estudiaba en un instituto de regular prestigio en la av. wilson. Algunos días cuando me sobraba la plata que me daban para el pasaje pasaba por donde venden dvs piratas y me compraba algunos. Yo, desde hace algunos años amaba las películas de terror. No era como los otros niños que tenían miedo de dormir o pensaban que el famoso "cuco" rondaba bajo la cama. Yo era como bu de monsters inc. Mi género favorito por mucho era el género zombie. Sobre la repisa de mi cuarto descanzaban algunos de los muchos dvs de películas zombie que alcansé a comprar. Cuando tenía quince quería ser científica, siempre las curas de enfermedades me había llamado la atención, sobre todo la del sida, mis papás siempre me decían que en el Perú eso no existía. Cuando terminé el colegio ingresé a una universidad privada. Dos años más tarde, el negocio de mis padres se quemó. Los problemas económicos nos inundaron e ingrese al instituto. El viaje interprovincial que hacía cada día era inevitable. Como fue inevitable lo que pasó ese día. Hasta ahora no podía creerlo. Esto...¿en perú? no, pues no era solo en Perú por lo yo sabía había comenzado en asia. Recuerdo ese día como si fuera ayer. No quiero que esto suene a una historia de guerra o algo así, pero eso pareció. Mis sospechas (que para ese momento consideraba tontas) comenzaron cuando vi una escena extraña cerca de la vía expresa. Al salir de mi casa, tomé el carro que me llevaba siempre. Había humo cerca de una casa pequeña al lado de la vía expresa, cerca del estadio. Parecía ser una cosa de todos los días, de esas que salen por el canal cuatro a las doce del día o peor la de las 10 de la noche, pero no. Pude ver un camión de bomberos, tres de ellos entraron con unas grandes mangueras. El tráfico era insoportable y me quedé con esa vista unos ocho minutos. Los bomberos no salieron nunca, pero salió una niña pequeña, caminaba extraño. Salió sola y miraba a la gente con unos ojos que nunca había visto antes, llevaba un oso en la mano derecha, parecía estar quemada o algo así. Nadie más salió. El camión quedó desierto, por lo menos antes de cuando ya no pude ver nada. Bajé del carro y camine rutinariamente las tres cuadras. Llegué a la puerta del instituto y me acerqué a rodolfo, el portero de siempre. La secretaria veía las noticias con cara de horror, pude ver el canal cuatro, pero eran las once de la mañana, era algo extraño. Las letras frente a la pantalla anunciaban un flash de último minuto. Por lo que mis papás me contaban, esos flashes solo salían en la época de votaciones y en el gobierno de fujimori (cuando el terrorismo inundaba la sierra). Era totalmente extraño para mí que un momento de rara estabilidad en el país, un flash así saliera de la nada. Tenía que ser algo realmente importante me dije. La secretaria comía doritos, su mirada no se despegaba del televisor. No pude preguntarle nada, porque para cuando iba a abrir mi boca... las palabras salieron primero de la anciana que vivía en la casona del frente: CIERREN LAS PUERTAS, ES EL FIN DEL MUNDO. Tenía unos ochenta y tantos años y sus palabras me parecieron un poco disparatadas (por lo menos unos treinta minutos). Rodolfo la miró y rió disimuladamente. En ese segundo, meche (la secretaria), valbuseo: Mierda!! rodolfo enserio, hazle caso a la vieja, te explico ahorita. Las casonas del centro de Lima había demostrado ser muy resistentes por años, así que fuera lo que fuera podíamos estar bien adentro. Atrás de la puerta principal había una de fierro y martha no dudó en ponerla como seguridad. Subimos al segundo piso y uno de los profesores puso las noticias. Mávila huertas estaba nerviosa, ese nerviosismo que jamás muestran los periodistas cuando salen al aire, antes de que pudiera decir cualquier cosa la señal se cortó. Martha había visto algo antes, por la desesperación con la que le habló al vigilante. Sin embargo, en esas dos horas que estuvimos sin decir palabra ni se inmutó. Eramos Rodolfo (el canoso y pequeño vigilante), Martha (la secretaria de unos veinticinco años), dos profesores y unos 13 alumnos.